ORO EN TIERRA DEL FUEGO

 
 
Lavado de oro

Lavado de oro

Fue un grito que como reguero de pólvora corrió por todos lados. No sólo se comentó en los principales centros vecinos como Punta Arenas, sino que apareció tanto en periódicos argentinos, chilenos y del resto de las capitales del mundo. En un primer momento se tuvo la sensación que se estaba ante la presencia de una fiebre del oro como la de California o la de Australia.

La primer noticia sobre oro en Tierra del Fuego fue un descubrimiento casual, no exactamente en Tierra del Fuego sino en Cabo Vírgenes, en el Estrecho de Magallanes pero sobre el continente.

Como consecuencia del hundimiento de un pesquero (1876) los náufragos cavaron en búsqueda de agua dulce y encontraron oro.Se organizaron expediciones y compañías exploradoras, pero el descubrimiento del codiciado metal en el archipiélago fueguino fue muy posterior y también por casualidad. A raíz del naufragio del Golden West en Bahía Slogget (1882), de la expedición de Bove que llevaba como invitados a Thomas Bridges y sus hijos Despard y Lucas, este último juntó "arena negra" y fango de la playa.

Tiempo después (1885), mientras residían en la misión de Ushuaia, mostró lo recogido al gobernador Paz que se interesó en el tema y envió un buque a buscar más lodo. Este regresó con una partida y la sorpresa fue el contenido del preciado metal. Después de esto fue solo dejar pasar el tiempo. La noticia fue siendo publicada una y otra vez sin que faltaran historias para adornarla un poco. Una de ellas fue la que como un simple misionero en el fin del mundo se había convertido en millonario junto a sus hijos, refiriéndose a la familia Bridges.

Agradecemos la colaboración del Geólogo Francisco P. Montecinos de la MONTEX MINING INC. - 6020 Cliff Road, EVERGREEN , COLORADO CO80439 , Estados unidos de Norteamérica. Especializado en prospección de minerales auríferos y petróleo.

El Museo Marítimo de Ushuaia junto con Zagier & Urruty publications ha editado el libro "Oro en Tierra del Fuego" de Carlos Pedro Vairo.

Apogeo

Un aluvión humano concurrió a la zona y si bien muchos pedían permisos para explorar en la Argentina en realidad se desparramaban por todas lados. Desde Punta Arenas algunos se dirigían hacia el Estrecho de Magallanes otros hacia la costa atlántica de la Isla Grande y el resto a la Isla Navarino que la usaban de escala para luego ir a todas las demás.

Los centros importantes fueron varios. En la región de la Bahía de San Sebastián el rumano Julio Popper se instaló en El Páramo con un gran número de trabajadores que incluía un pequeño ejército bien armado para expulsar a los mineros intrusos. Sin llegar a proponérselo defendió la soberanía argentina. Fue un visionario para su tiempo; propuso la prolongación del Ferrocarril hasta Santa Cruz y el Telégrafo hasta Tierra del Fuego como puntos importantes, además de urgentes, para integración desarrollo de la región. Enérgico, dueño de un carácter muy fuerte y con buenas vinculaciones en Buenos Aires, llegó a acuñar monedas de oro y estampillas. La extracción de oro le produjo para su Compañía 173 kilogramos entre 1886 y 1992.

 

Sus disputas con los gobernadores de Tierra del Fuego, su fuerte postura contra la intromisión de chilenos y la fama que se ganó por la forma en que trataba a los indígenas, hizo que lo apodaran el Dictador Fueguino. Hacia el sur, uno de los principales centros fue Bahía Slogget, ya en jurisdicción de Ushuaia. Otros dos centros importantes fueron las Islas Lennox, Nueva y Picton. El apogeo de la búsqueda fue en 1893 donde más de 800 mineros trabajaban en dichos lugares. La mayoría de los hombres provenían de la costa dálmata siendo pescadores o marinos. En el refugio de Lennox se podía contar a m s de 100 hombres, cada uno con su pequeña parcela de playa donde cavaban para sacar el barro que luego lavaban.

Método de extracción empleado

Cerca de la rompiente se cavaba entre las piedras y el ripio de las playas y a una profundidad que oscilaba de los 60 cm a varios metros de profundidad se hallaba la roca. Sobre esta se podía encontrar un fango negro con polvo de hierro y algo de oro. Se juntaba todo el lodo y se lo lavaba. El oro se lo encontraba en forma de pepitas o sino más comúnmente, en delgadas películas.

En la Isla Lennox se llegó a instalar una draga extractora de lodo aurífero, ésta fue luego trasladada a Bahía Slogget, donde todavía se pueden ver sus restos. Otro método empleado fue el de la "challa". Se lavaban las arenas auríferas (lodo) haciendo decantar las partículas más pequeñas. Con un imán retiraban el hierro y luego terminaban de separar el oro con mercurio; con la ayuda de un trapo estrujaban la mezcla dividiendo los componentes. Las empresas que se formaron fueron muchas, como "The Argentine Tierra del Fuego Exploration Company", dueña de la draga de Slogget, o "The Fortunato Beban Exploration Company" entre otras.

La mayoría de estas empresas terminaron en un rotundo fracaso pero sirvieron para poblar el archipiélago, tal como sucedió con los Beban que se afincaron en Ushuaia y en la Isla Navarino. En el caso de la empresa inglesa, dueña de la draga de Slogget, también contribuyó al desarrollo de la región dado que su desaliento fue tan grande que se fueron abruptamente dejando un cuidador. Éste, después de 20 años de cuidar la máquina y no tener más noticias de la empresa, recibió una compensación por parte del gobierno argentino al otorgársele la ocupación de las tierras; en ellas instaló un establecimiento ganadero. Aparentemente y según versiones, con pocas pruebas concretas, solamente tuvieron suerte los que arribaron en los primeros años.

Así se comentó que en la Isla Lennox 17 hombres en tres meses de trabajo cosecharon 70 kilogramos de oro. Otros hablaban de pepas del tamaño de dos o tres libras esterlinas, llegándose a exageraciones como que en las instalaciones de Popper en Bahía Slogget se había obtenido 14 Kg. de oro en una sola noche, con pepas de más de 500 gr.

Lo cierto es que fueron muchos los hombres que con arduo y paciente trabajo lograban llenar una o dos botellas de oro y luego se dirigían hacia Ushuaia o Punta Arenas. Allí pagaban lo que debían, hacían nuevas compras para las próximas exploraciones y despilfarraban el resto quedando como cuando empezaron con la aventura. Según Lucas Bridges: "La llegada de los mineros fue para nosotros un envío del cielo."

Es que dio posibilidad de que el almacén de la estancia Harberton tuviera movimiento, además de poder colocar carnes de su hacienda. También motivó a que se crearan otros comercios y se asentara más población. En esa época Punta Arenas era una pujante ciudad donde recalaban cientos de vapores por mes. En ella se reaprovisionaban especialmente de carbón. Era el punto de encuentro entre los que tenían destino el Atlántico o el Pacífico. Ya la era de los grandes veleros estaba en sus últimos años de existencia.

Ellos eran los que debían hacer la ruta del Cabo de Hornos ante la dificultad de navegar el Estrecho de Magallanes solamente a vela. Así es que hasta la apertura del Canal de Panamá (1914), Punta Arenas disfrutó de un auge y una bonanza económica envidiable. Bastante lejos estaban los primeros pobladores del Beagle y el archipiélago fueguino que en más de una oportunidad tenían que pedir ayuda a los buques que pasaban por la zona para poder subsistir. En los comercios los oreros pagaban con polvo de oro; para ello se usaba una balanza y una moneda como medida. Esta costumbre continuó por mucho tiempo ya que aunque no había oro en cantidades suficientes para una compañía si se podía hallar algo lavando arena. La forma de transportarlo era en botellas y, según lo vivido por Vicente Padín en su comercio por la década del 50, llegaban los oreros con botellas de sidra conteniendo oro en polvo; llenas pesaban alrededor de los 15 kg.

La peor parte de esta fiebre del oro la tuvieron los primitivos habitantes de la zona. Sin entender muy bien que pasaba los Selk´nam (en el norte) fueron expulsados de sus tierras y si intentaban tomar una oveja, como les era natural cazar un guanaco, se los perseguía para, en el mejor de los casos, encarcelarlos. Los yámanas fueron desplazados de sus tranquilas bahías e inducidos raudamente a otras costumbres, la peor de ellas fue el alcohol; las mujeres se emborrachaban y si no se entregaban eran tomadas por marineros, oreros o loberos. El fin se aceleraba raudamente.

¿De donde proviene ese oro?

Muchos se preguntan cuál es el origen de éste oro y si todavía se puede encontrar el preciado mineral. La respuesta a la segunda pregunta es afirmativa y para ellos que quieran largarse a la búsqueda de oro hay lugares claves en donde van a tener resultado positivo; ellos son: la Bahía de San Sebastián, cerca del paraje conocido como El Páramo; en el Estrecho de Magallanes, sobre fondo de piedras y en la Bahía Inútil.

Esto se sabe por los trabajos de investigación encarados en la década del 70 por compañías norteamericanas y chilenas. El Geólogo Francisco P. Montecinos, de la MONTEX Mining Inc. de Estados Unidos de Norteamérica, determinó la presencia de oro con diferentes concentraciones en los lugares mencionados. Según sus estudios se trata de oro aluvional llevado por las aguas de los ríos hasta el mar siendo luego arrastrado por las corrientes marinas.

Así es como los distintos ríos de la Bahía de San Sebastián portan partículas auríferas que al ingresar al océano Atlántico son arrastradas por una corriente marina que circula hacia el norte reduciéndose el depósito en El Páramo. Incluso una empresa norteamericana comenzó con la extracción de oro en el Estrecho de Magallanes, en la década de los 80, pero su resultado no fue económicamente suficiente para ellos. Ahora bien: ¨qué es el oro aluvional? Muy sencillo, se trata de metal dejado en descubierto por los glaciares en las morenas; las sucesivas precipitaciones y deshielos hace que este sea llevado por el agua. Se trata de un proceso de millones de años y los primeros mineros que se radicaron en la zona pudieron obtener lo que nadie tocó por muchos milenios. De otra forma el yugoslavo Popper nunca hubiese acuñado monedas de oro propias.

Oro Negro: petroleo

La explotación del petróleo y gas comenzó con los trabajos de Yacimientos Petrolíferos Fiscales en la zona de San Sebastián y luego se extendió por todo el norte de la isla. En la actualidad la exploración y perforación continua por el mar y se cree que existe una gran cuenca hasta las Malvinas.

Las Malvinas están dentro de los 200 metros de profundidad y es muy factible que se pueda encontrar petróleo. Por eso el tema de la soberanía es tan importante dado que da una proyección de 200 millas alrededor de las mismas. El primer pozo perforado ( TF-1 ) fue en 1949 y es uno de los suministradores de gas. La producción de crudo es cargada en buques en la Bahía de San Sebastián por medio de bollones. Un gasoducto recorre toda la isla y traslada el gas líquido al continente. A partir de 1991, comenzó el proceso privatizador de exploración, perforación y extracción del petróleo como así también de la comercialización. El Gas Natural también se encuentra en dicho proceso. En la actualidad hay varios centenares de pozos en explotación en tierra y varias plataformas en el estrecho de Magallanes. Lamentablemente mucho gas es liberado al venteo y quemado al no contar con instalaciones suficientes.